sábado, julio 26, 2008

BATMAN: EL CABALLERO DE LA NOCHE


Cuando Christopher Nolan asumió el proyecto de las “precuelas” de Batman (historias del joven Batman) era una apuesta muy difícil y arriesgada, dado que Tim Burton había colocado dos marcas muy altas en la saga del hombre murciélago con Batman (1989) y Batman regresa (Batman returns, 1992), donde recreó a un verdadero anti-héroe, con obsesiones nocturnas y traumas infantiles que impulsan su accionar contra el crimen. El Batman que protagonizó Michael Keaton con su carácter taciturno y neurosis fóbicas le daba un aspecto sombrío al personaje difícil de superar, lo que se demostró con las pobres adaptaciones siguientes de Joel Schumacher (Batman forever -1995- y Batman y Robin -1997-). El proyecto parecía agotado, por lo menos por un tiempo, así como exigía a gritos un relevo creativo.

La primera película bajo la batuta de Nolan (Batman begins, 2005) explicaba la génesis del hombre murciélago, muy en la honda “dark” que Tim Burton le había conferido al héroe, y si bien la película era interesante, no llegaba a envolver con la trama, por lo que la segunda parte generaba expectativas, sobretodo porque se “resucitaba” al villano por antonomasia de Batman, el Jocker o Guasón. Jack Nicholson le había impuesto un perfil sorprendente al villano, muy al estilo burtoniano, de payaso sádico o malévolo. Nolan apuesta por ese estilo de villano, profundizándolo, minimizando el humor negro hasta convertirlo totalmente en oscuridad, en esencia pura del mal. El Jocker de Heath Ledger es la esencia de la maldad, instintiva, brutal, visceral, alienado totalmente de la realidad. Demás está decir que como en el Guasón de Burton, el villano se lleva las palmas frente al héroe, sencillamente “le roba la película” a Christian Bale, a pesar que el Batman de Bale es esencialmente violento y tan instintivo y ajeno a cualquier principio ético o norma del estado de derecho como sus adversarios (hay una visión ideológica implícita del “todo vale” en ese comportamiento, muy en la onda post 11-S).

Pero, no solo son los protagónicos quienes ponen el peso en el filme, también los secundarios están en todo el encaje, comenzando por el fiscal Harvey Dent, “Dos caras”, el hombre incorruptible que se entrega a la lucha contra la Mafia y termina envuelto en sus odios y venganzas; el Alfred de Michael Caine, muy “british”, esta vez como el brazo derecho del hombre murciélago y experto en informática; o Gary Oldman, como el policía incorruptible, que muchas veces solitario debe luchar contra el crimen organizado.

Pero ese ambiente oscuro, esa trama densa, de tonos fríos y fotografía opaca, acompañado de una música bastante “heavy”, no sería nada sin el aliento trágico que Nolan ha insuflado a la historia. Esa sensación que tenemos a cada momento que la vida de los personajes pende de unos finos hilos y que por más que quieran no pueden escapar de su sino, o cuando el propio Batman se ofrece de “chivo expiatorio” de todos los crímenes cometidos a fin de salvar la imagen de héroe que Ciudad Gótica necesita a través de la memoria de Harvey Dent (la necesidad de un héroe o de un mito que mantenga en alto la moral de la lucha anticorrupción). Esos elementos le confieren al filme un “aire trágico” (“no puedes escapar a tú destino”), rematado en la necesidad que el héroe pase a ser anti-héroe a fin de preservar la ingenuidad y ciertos valores en el pueblo, lo que le otorga una profundidad no vista en otros personajes de ficción. Es una vuelta de tuerca que remite a los clásicos griegos.

Sin duda, Batman: el caballero de la noche es la mejor de las dos películas que sobre el hombre muerciélago hasta el momento Nolan cuenta en su haber, y sin duda alguna también está a la altura del Batman de Tim Burton, y en algunos momentos diríamos que hasta lo supera.
Eduardo Jiménez J.
lagartocine@yahoo.es


BATMAN: EL CABALLERO DE LA NOCHE [The Dark Knight]
Dir.: Christopher Nolan
Guión: Jonathan Nolan y Christopher Nolan, basado en los caracteres creados por Bob Kane
c/ Christian Bale (Bruce Wayne / Batman), Heath Ledger (The Joker), Aaron Eckhart (Harvey Dent / Two-Face), Michael Caine (Alfred Pennyworth), Maggie Gyllenhaal (Rachel Dawes), Gary Oldman (Lt. James Gordon), Morgan Freeman (Lucius Fox)
EEUU/2008/Acción, drama***/Estrenos

lunes, julio 21, 2008

GREASE CUMPLIÓ TREINTA AÑOS


¿Por qué Grease es recordada luego de tres décadas sin ser una gran película? La respuesta –para despecho de los gustos elitistas- está relacionado más con los gustos populares que con la calidad intrínseca del filme. Como sucede con Casablanca –que hace poco cumplió sus bien afianzados 65 años-, más que las bondades de la película es ese aire de amor eterno que la rodea. En Grease se respira todavía ingenuidad, de historias de amor “para toda la vida”, contextualizada en un pasado relativamente lejano cuando se estrenó el filme: los años cincuenta, en plena era del trastocamiento de los valores tradicionales y de inicio del rock and roll, lo que posibilita que la película sea vista por las nuevas generaciones con cierto aire de rebeldía a lo James Dean. También está el hecho que el uso de códigos o maneras propias de los adolescentes son reconocibles por cualquier joven occidental de hoy o de antes, así como los tipos variados (“el matón”, el nerd, los chicos y chicas populares, etc.).

Eso ha permitido que un filme artísticamente mediocre –el director se limitó a filmar las escenas con la cámara frontal y dejando que John Travolta y Olivia Newton-John canten y encanten en escena- sea disfrutado treinta años después. Por cierto, para los cinéfilos será un descubrimiento ver a un John Travolta todavía delgado y que venía del éxito de Fiebre de sábado por la noche donde realizó piruetas al ritmo de la disco-music, que en los ochenta vería opacada su carrera para luego resurgir en los noventa gracias a Quentin Tarantino y Tiempos modernos (Pulp fiction, 1994). Poco después y de la mano de John Woo interpretaría a dos villanos memorables en Código flecha rota (Broken arroz, 1996) y Contracara (Face/off, 1997), consolidándose como actor dramático. Hace poco hizo una parodia de su época de danzarín en Hairspray (2007), entretenida comedia musical ambientada también en los cincuenta y donde da vida a una obesa ama de casa (los mal hablados decían que el papel lo hizo con bastante “naturalidad”). Olivia Newton-John, en cambio, venía de ser una estrella del canto que en los ochenta se retiraría víctima del cáncer, realizando ahora breves apariciones.
Algunos años después, en 1982, se estrenó Grease 2, con Michelle Pfeiffer en el protagónico, pero no tuvo el éxito de la versión original.
Eduardo Jiménez J.
lagartocine@yahoo.es


GREASE
Dir.: Randal Kleiser
Guión: Jim Jacobs y Warren Casey
c/ John Travolta (Danny Zuko), Olivia Newton-John (Sandy Olsson), Stockard Channing (Betty Rizzo), Jeff Conaway (Kenickie)
EEUU/1978/Musical**/Dvd/Películas del ayer

miércoles, julio 16, 2008

KUNG FU PANDA


Esta vez Dreamworks nos trae no una de sus mejores historias, ni tampoco la más compleja, sino dirigida al público familiar y sobretodo a los niños. Las hazañas de un osito panda que quiere ser héroe del kung fu tiene su lado interesante sobretodo en la caracterización de Po y del maestro Shifu, ambos están concebidos con carácterísticas de la personalidad de quienes le prestaron la voz en la versión original. Po tiene de grandilocuente, obeso, narcisista y exagerado de Jack Black; mientras el maestro Shifu del tipo neurótico y obsesivo, perfeccionista al detalle, que quiere controlar todo, muy al estilo de Dustin Hoffman. Esos personajes son lo mejor. Por lo demás la historia tiene la moraleja bastante americana de alcanzar el sueño por más difícil que parezca y que el único secreto es confiar en nosotros mismos como lo demuestra el pergamino en blanco que refleja solo nuestro rostro o la sopa del ingrediente secreto: no hay ningún secreto. Hay que destacar las coreografías de los combates: son preciosas y milimétricas. Lo más probable es que de acá a un tiempo tenga su continuación.
Eduardo Jiménez J.
lagartocine@yahoo.es


KUNG FU PANDA
Dirrs: Mark Osborne y John Stevenson
Guión: Jonathan Aibel y Glenn Berger
Voces originales: Jack Black (Po), Dustin Hoffman (Shifu), Angelina Jolie (Tigress), Ian McShane (Tai Lung), Jackie Chan (Monkey), Seth Rogen (Mantis), Lucy Liu (Viper), David Cross (Crane), Randall Duk Kim (Oogway)
EEUU/2008/Animación digital***/Dvd/Estrenos

viernes, julio 11, 2008

EL ÚLTIMO VALS


Documental sobre el último concierto de la banda de rock “The band”. Refleja el espíritu entre nostálgico y triste de las despedidas, intercalado con el concierto, las estrellas invitadas y las declaraciones de los miembros del grupo. La escena final que da título al filme denota muy bien ese espíritu. Toda despedida siempre es triste.
Eduardo Jiménez J.
lagartocine@yahoo.es


EL ÚLTIMO VALS [The Last Waltz]
Dir. Martin Scorsese
EEUU/1978/Documental***/DVD/Películas del ayer

martes, julio 08, 2008

PARÍS, TE AMO


Las películas de historias cortas se asemejan a los cuentos escritos: deben ser perfectas, redondas. Con la novela pasa todo lo contrario. En el “genero largo” puede entrar mucho “ripio” y nadie se da cuenta. Igual en un largometraje. En cambio, en el cuento y en las historias cortas llevadas al cine no se puede pasar “gato por liebre”. Un cuento no admite errores, basta una coma, una palabra o una línea mal encajada para que el cuento se venga abajo. Es más difícil hacer un buen cuento que una buena novela; por eso, existen más novelistas que buenos cuentistas. Igual sucede con las historias cortas en el cine: se debe ser un maestro para poder contar una historia en solo cinco minutos. Y no todos los 18 realizadores del filme colectivo París, te amo han demostrado esa capacidad. Curiosamente varios de estos han recurrido a un “truco” para salir airosos de la prueba: insinuar que lo escasamente narrado es el inicio de “algo más”, como un comienzo o un prólogo a una historia más larga, y muy pocos han “redondeado” su faena en el tiempo exigido por los productores.

La temática como no podía ser de otro modo gira en torno al amor en todas sus variantes y ángulos. La “capital del amor” se prestaba para tocar una temática sentimental y darle un aire romántico al asunto, contratando a realizadores conocidos en el viejo y el nuevo mundo, así como a actores de filmes conocidísimos (marketing que le dicen). El resultado obviamente es disparejo. No porque venga de Europa, y sobretodo de Francia, o darle un aire de “cultismo” al tema, nos vamos a entusiasmar. En lo personal nos quedamos con: Tullerías (Tuileries) de los Hnos. Coen, como siempre habituales en su humor negro con una historia redonda; Bastilla (Bastille) de Isabel Coixet, con esa historia de amor con toques humorísticos y melodramáticos bien balanceados; Torre Eiffel (Tour Eiffel) de Sylvain Chomet, con historia de mimos tierna y fantástica; Barrio de la Madeleine (Quartier de la Madeleine) de Vincenzo Natali, historia de vampiros modernos con amor (y mordisco) a primera vista; y, Distrito 14 (14e arrondissement) de Alexander Payne, monólogo de la protagonista desde la soledad. En cuanto a actuaciones, los cinéfilos tendrán un placer especial al ver (bastante viejos por obvias razones) a la gran Gena Rowlands, Ben Gazzara (cómplices y colaboradores habituales del desaparecido John Cassavettes y la primera viuda de este por añadidura), y al “hombre rudo” del cine (bastante “ajado” por cierto) Nick Nolte.
Solo por ellos vale la pena ver el filme.
Eduardo Jiménez J.
lagartocine@yahoo.es


PARÍS, TE AMO [Paris, je t'aime]
Dir.: Olivier Assayas, Sylvain Chomet, Isabel Coixet, Hnos. Coen, Gus Van Sant, Wes Craven entro otros.
Idea original: Tristan Carne
Guión: Bruno Podalydès, Oliver Schmitz, Christopher Doyle, entre otros.
Fra/2006/Filme colectivo***/Dvd/Estrenos

viernes, julio 04, 2008

GOYA EN BURDEOS


Saura fue un realizador interesante en los últimos años del franquismo.
Con una censura que si bien se había flexibilizado, todavía vigilaba receloso el cine que venía de fuera y el hecho en la propia España, Carlos Saura ideó las historias que contaba como metáforas del malestar de una sociedad enferma. Elisa vida mía, Cría cuervos, La prima Angélica, son algunos de los títulos recordables de aquella época, de lejos, la más interesante de su filmografía.
Sin embargo, con el advenimiento de la democracia y el fin de la censura no tenía sentido seguir usando la clave de las metáforas, por lo que Saura debió emplear otro estilo. Allí es donde se acerca con bastante interés al folclor español, sobretodo el flamenco, a fin de trasmitir sus ideas. De esta etapa son Carmen, Bodas de sangre y Goya (posterior a esta última tiene por lo menos tres títulos más: Buñuel y la mesa del rey Salomón, Salomé y El séptimo día).
Goya trata sobre los últimos días del maestro que revolucionó la pintura. De sus ideas políticas liberales, de sus grandes amores, de los mimos de una corte paralizada en la mediocridad y el latrocinio, de su sordera inmemorial. Sin embargo, el resultado no es del todo satisfactorio. Es claro que Saura ha querido trasmitir ese sentimiento de angustia y de monstruosidad que el gran maestro plasmó en sus pinturas, aunque los resultados no han sido del todo halagüeños.
Goya se queda en el intento, aunque interesante de recrear la vida de un personaje célebre en el celuloide, y sobretodo en la notable actuación de Francisco “Paco” Rabal.
Eduardo Jiménez J.
lagartocine@yahoo.es


GOYA EN BURDEOS
Dir. y guión: Carlos Saura
c/ Francisco Rabal, José Coronado, Dafne Fernández, Maribel Verdú, Eulalia Ramón, Joaquín Climent, Cristina Espinosa, José María Pou, Saturnino García, Carlos Hipólito
España/1999/Biopic***/Dvd/Películas del ayer

martes, julio 01, 2008

CLASH BY NIGHT


Fuerte melodrama con soberbias actuaciones sobre triángulo amoroso, de cara al mar (se desarrolla en un pueblo portuario). Destaca en un papel secundario Marilyn Monroe en el papel que la caracterizaría después: la rubia que exhala un sensualismo a flor de piel. Hay una frase del personaje de Jerry que la exclama, cuando desengañado del amor de su infiel esposa decide darle una segunda oportunidad, frase con la que se cierra la película y que es muy cierta: Qué terrible cosa, hay que confiar en alguien. No hay remedio.
Eduardo Jiménez J.
lagartocine@yahoo.es


CLASH BY NIGHT
Dir:Fritz Lang
Guión: Clifford Odets (play) y Alfred Hayes
c/ Barbara Stanwyck (Mae), Paul Douglas (Jerry D'Amato), Robert Ryan (Earl),
Marilyn Monroe (Peggy), J. Carrol Naish (Uncle Vince)
USA/1952/Melodrama***/Dvd/Películas del ayer