jueves, julio 27, 2006


CARS
Dir.: John Lasseter
USA/2006/Animación digital+++/Cine

Excelente animación digital sobre un carro de carreras fanfarrón, ególatra y vanidoso, el Rayo McQueen, acostumbrado a los reflejos de la fama y que –como suele suceder en estos cuentos- cuando se dirige a competir por una codiciada Copa, por “azares del destino” recala en un pueblito perdido llamado Radiador Springs, donde conocerá el valor del afecto, la solidaridad y el amor.

Como ocurre en las historias de aprendizaje, se resalta la moraleja de rescatar los valores perdidos y que más importante que competir es saber vivir la vida. Ahí están las sabias enseñanzas del viejo auto Doc Hudson que se libró de las veleidades de la fama al sufrir un accidente, o de Sally Carrera abogada exitosa en California que dejó un día todo ese mundo cuando se dio cuenta que no estaba viviendo realmente.

Lo bueno es que la moraleja está bien hilvanada en una historia entretenida, que si bien es tan vieja como el hombre, Pixar y Disney la han sabido recrear a los nuevos tiempos con una tecnología digital que sorprende por su verismo.

Filme de enseñanza e historia de aprendizaje, se pasa un buen momento. Excelente para ir con la familia, sobretodo en estos días de feriado largo.
lagartocine@yahoo.es

lunes, julio 24, 2006


FLORES ROTAS [Broken flowers]
Dir. y guión: Jim Jarmusch
c/ Bill Murray (Don Johnston), Sharon Stone (Laura), Jessica Lange (Carmen)
USA/2005/Comedia dramática+++

Flores rotas tiene puntos de contacto con el anterior trabado de Jarmusch, Café y cigarrillos [Coffee and cigarettes], con Bill Murray también y lograda comedia dramática en forma de pequeños episodios, donde el elemento común era una mesa, café, cigarrillos y también la soledad, protagonista silencioso que se desplegará en el siguiente largo, Flores rotas.

Don Johnston (Bill Murray) es un tipo que vive sólo, ha hecho una pequeña fortuna gracias al software, tiene como vecinos y amigos a una pareja negra en un barrio de clase media típico. No está rodeado de lujos, su vida es más bien austera y bastante monótona, hasta que recibe una carta anónima que le comunica que tiene un hijo con una de sus ex novias de juventud y que lo está buscando, sin dar mayores detalles.

Esa curiosidad por conocer a alguien de su propia sangre y no teniendo más datos que la memoria de las relaciones ocasionales que tuvo con sus ex girls friends, lo moviliza a establecer un plan para irlas a visitar una por una y saber de quien es ese supuesto hijo, llevando rosas rojas para cada una de ellas (de allí el título simbólico que ha sido respetado en español).
Narrada a moda de una road movie, los encuentros son lo más delicioso de la trama, donde naturalmente uno tiene el recuerdo de cómo fue la novia o el novio, pero los años lo (la) han hecho cambiar, y la realidad es muy distinta a lo que se vivió en el pasado.

Parábola de la soledad, cuenta con un sólido trabajo dramático de Bill Murray que le da consistencia y credibilidad a su personaje, en la misma línea de Perdidos en Tokio (practicante parece el mismo personaje, aunque esta vez le da una inexpresión extrema –“cara de palo”- que conservará a lo largo de la hora cuarenticinco que dura el filme), que revela un giro en su carrera de actor cómico, ampliando su registro y denotando una madurez en su carrera actoral.

Asimismo, es un placer ver a actrices que se encuentran medio retiradas y que en la madurez también están aportando una mejor performance a su carrera, como es el caso de Sharon Stone y Jessica Lange. Inolvidables, una como una madre divorciada que sigue tan adolescente como su propia hija, y la otra como una veterinaria que “conversa” con los animales y sabe lo que dicen.

Retrospectiva de un Casanova en el declive de su vida, que en busca de un supuesto hijo es una excusa y una esperanza de aferrarse al mundo al llegar a la vejez. No se la pierdan, realmente vale la pena.
lagartocine@yahoo.es

jueves, julio 20, 2006


EL NUEVO MUNDO [The new world]
Escrita y dirigida. Terrence Malick
c/ Colin Farrell (John Smith), Q'Orianka Kilcher (Pocahontas), Christopher Plummer (Capitán Newport), Christian Bale (John Rolfe)
USA/2005/Drama histórico++++

Terrence Malick es un autor poco conocido para las mayorías. Con apenas cuatro largometrajes en treinta años, profesor de Filosofía, tiende en sus filmes a expresar más bien conceptos y sensaciones que acción propiamente. De allí que sus filmes sean considerados “aburridos” para los no cinéfilos y espanten de las salas a los que busquen sólo acción.
El nuevo mundo se emparenta mucho con su filme anterior, La delgada línea roja. Monólogos interiores que expresan lo que sienten los personajes, dicotomías claramente diferenciadas entre el mundo “salvaje” y el mundo “civilizado”, paisajes naturales muy estilizados y una clara simbiosis pagana del hombre con la naturaleza que lo rodea, son el marco en que se desarrolla el filme.

Con una estructura lineal, comienza con la llegada de los primeros colonos a Virginia en 1607, para abarcar un periodo histórico de aproximadamente diez años, donde el personaje-guía que atraviesa toda la historia es la princesa india Pocahontas, desde el encuentro fundacional de dos mundos simbolizado en su romance con el Capitán Smith, hasta su muerte por viruela acaecida en el año de 1617, luego de haber visitado al rey Jacobo en Inglaterra (hecho histórico cierto).

Si bien Pocahontas y los demás personajes existieron, la película no pretende ser una reconstrucción histórica propiamente (Malick se ha permitido varias licencias, respetando la leyenda del gran amor entre Pocahontas y el Capitán Smith), sino más bien diferenciar marcadamente la ingenuidad de los nativos versus la astucia y ambición de los colonos que usan a la princesa india para sus fines (según la historia, Pocahontas es retenida contra su voluntad en Jamestown -futura Virgina- a fin que su padre, Powhatan, firme la paz con ellos), marcando un contraste entre un mundo que se va y otro que comienza. Malick no busca retratar un choque brutal entre dos civilizaciones, sino contarnos la leyenda fundacional que está encarnada en el gran amor de Pocahontas y Smith, nacimiento de lo que sería la nación norteamericana, todo ello enmarcado en un ambiente bastante lírico, estilizado y nostálgico, llevándolo a extremos audaces que no contenía La delgada línea roja.

Quizás Malick, que siempre fue un formalista en sus filmes, haya llegado a un límite poco probable de superar en un siguiente filme. El nuevo mundo es una película difícil, no concesiva, que requiere la atención permanente del espectador y por eso probablemente no duró mucho en cartelera (apenas dos semanas); pero nostálgica e idílicamente bella, como esas pinturas naif que retratan épocas ya idas y que nos hace evocar como fue un tiempo que pertenece al pasado.
El nuevo mundo merece verse y apreciarse en toda su magnitud, pese a los excesos estilísticos que en algunas partes comete Malick. Vale la pena.
lagartocine@yahoo.es